Su dueño, Don Héctor Juan Dottori, hijo de inmigrantes italianos, dedicando su vida al trabajo, forja una próspera empresa familiar que inicia sus actividades en el área del desecado de frutas hace ya unos 30 años.

Junto con el apoyo de su esposa e hijos, ha logrado desarrollar, con el paso de los años, una empresa conformada por plantaciones, hornos de desecado y una planta de empaque apropiada para trabajar con el producto que les ocupa, las CIRUELAS DESECADAS.

Radicados en el Departamento de San Rafael, al sur de la Provincia de Mendoza, en la República Argentina, logran ofrecer al Mercado Internacional productos de altísima calidad.